Hoy el día ha sido
tranquilo pero intenso. Tranquilo para nuestros cerebros, intenso para nuestras
piernas/pies.
Por la mañana hemos
cogido el autobús turístico de ayer para ir a visitar la catedral de Sant
Patrick y la catedral de Christ Church.
La primera conservaba más parte antigua todo y ser más “nueva”. Las dos visitas han sido interesantes, son catedrales impresionantes, grandes y con unas vidrieras preciosas: unas de colores muy vivos y otra como más antiguas, de colores ahumados y representaciones bíblicas. Lo que más llama la atención son los suelos, que están todos cubiertos de plaquitas de azulejos formando dibujos con colores, preciosos.
Tanto Joan como yo estábamos de acuerdo en que la de Christ Church tenía más encanto, sobretodo en las catacumbas, donde se ha conservado todo muy bien y han puesto una cafetería muy pintoresca.
La primera conservaba más parte antigua todo y ser más “nueva”. Las dos visitas han sido interesantes, son catedrales impresionantes, grandes y con unas vidrieras preciosas: unas de colores muy vivos y otra como más antiguas, de colores ahumados y representaciones bíblicas. Lo que más llama la atención son los suelos, que están todos cubiertos de plaquitas de azulejos formando dibujos con colores, preciosos.
Tanto Joan como yo estábamos de acuerdo en que la de Christ Church tenía más encanto, sobretodo en las catacumbas, donde se ha conservado todo muy bien y han puesto una cafetería muy pintoresca.
También había expuesto en
una vitrina los cadáveres de un gato y un ratón encontrados momificados hace
años.
No deja de ser algo curioso, pero para Joan ha sido toda una experiencia, y hasta que no hemos encontrado la vitrina, no se ha quedado tranquilo. Por un momento he llegado a pensar que si no encontrábamos a dichos animalitos, nosotros correríamos la misma suerte y nos quedaríamos por allí medio muertos hasta que alguien nos encontrara.
El viaje a Dublín ha tenido sentido por poder ver tal reliquia zoológica. Lagrimas de emoción.
No deja de ser algo curioso, pero para Joan ha sido toda una experiencia, y hasta que no hemos encontrado la vitrina, no se ha quedado tranquilo. Por un momento he llegado a pensar que si no encontrábamos a dichos animalitos, nosotros correríamos la misma suerte y nos quedaríamos por allí medio muertos hasta que alguien nos encontrara.
El viaje a Dublín ha tenido sentido por poder ver tal reliquia zoológica. Lagrimas de emoción.
Después, hemos caminado
bastante hasta el museo nacional de historia y arte. Es un museo enorme que, a
su vez, hace las funciones de casernas militares y lugar de maniobras. De
hecho, cuando hemos llegado, había un montón de soldaditos en firme.
Del museo hemos visto
todo bastante por encima porque estábamos cansados, pero nos ha parecido muy
interesante la parte dedicada a la independencia de Irlanda. Una muy
interesante exposición.
Cuanto más conozco de la historia de este país, más interesante la encuentro. Estos días estoy investigando por internet todo lo que puedo sobre historia de Irlanda, y así toda la información que no pueda obtener con las visitas turísticas por el idioma, aquí la tengo disponible.
San Google bendito, amén.
Cuanto más conozco de la historia de este país, más interesante la encuentro. Estos días estoy investigando por internet todo lo que puedo sobre historia de Irlanda, y así toda la información que no pueda obtener con las visitas turísticas por el idioma, aquí la tengo disponible.
San Google bendito, amén.
Hemos vuelto a comer a
casa, verdurita, arroz blanco y pollito a la plancha. El arroz es largo, aquí
no hay del tipo más redondito que hay en España, y Joan ha pasado de querer
comer arroz a cada hora del día, a querer comerlo sólo una vez a la semana, y
gracias.
El hombre, animal de costumbres.
El hombre, animal de costumbres.
Después de descansar un
poco, hemos ido a coger el autobús turístico al centro para acabar lo que nos
faltaba de ruta. Una vez más, encantadísimos con el autobús. Merece mucho la
pena.
Además, hoy ha hecho un día estupendo en cuanto a temperatura, y hemos podido hacer parte de la ruta en la parte de arriba del autobús.
Además, hoy ha hecho un día estupendo en cuanto a temperatura, y hemos podido hacer parte de la ruta en la parte de arriba del autobús.
Y poca cosa más, vuelta a
casa a merendar, planchar (me he enamorado de la plancha de mi hermanito), cometer
un genocidio mosquitil, y vaguear un rato a petición de nuestras plantas de los
pies. De aquí a un ratito cenaremos y a esperar a que llegue Mister Raulito.
Mañana cogeremos la versión
irlandesa del cercanías. Joan quiere llevarme a ver una playa de 2 metros
cuadrados. Dice que es una pasada y yo no me veo con ganas de romperle la
ilusión. Tiene narices la cosa, no vamos nunca a la playa en Catalunya, y me
quiere llevar a una playa de Irlanda. Tengo un novio que no me lo merezco.
El dato más emocionante
de nuestro día ha sido una súper compra que hemos hecho de dos latas de atún de
las Seychelles. Como si no hubiera un mañana.
Bye bye!
I am the anonymous ... Glad you're happy ... over eating rice!!
ResponderEliminarIba a corregirte una supuesta catalanada (caserna militar) pero, hombre prevenido, he mirado diccionario y ... también vale en tu idioma materno.
Many kisses to both..!!